¿Qué tal si en este Día del Niño les regalas a tus pequeños el hábito de cuidar su vista?
Los especialistas recomiendan llevar a los niños a su primera revisión ocular a los tres años de edad y, a menos de que el doctor indique un diagnóstico personalizado, es recomendable llevarlos al menos cada dos años para mantener su vista saludable.
Conoce algunas recomendaciones que tienes que considerar para esa primera visita de tu pequeño a Ópticas Lux.
- Explicarles que todos, chicos y grandes queremos ir a ver a nuestro especialista de los ojos para poder ver muy bien todas las cosas bonitas
- Contarles un cuento donde algún personaje acuda a realizar su examen de la vista
- Mencionarles que durante el examen tendrán que adivinar figuras y letras que aparecerán en una pantalla
- Tratar la visita como una salida para descubrir algo nuevo
Hay muchos hábitos que podemos fomentar para que siempre tengan una vista sana como:
- Evitar que pasen mucho tiempo frente a la televisión, tablet, celular o computadora
- Tomar descansos cuando estén observando estas pantallas
- Protege sus ojos de los rayos UV con anteojos solares. ¿Sabías que el cristalino de un niño todavía no protege completamente a su retina de la luz ultravioleta? Esto es porque sus ojos se desarrollan completamente hasta la adolescencia ¡así que no dudes en seguir esta recomendación!
¿Cómo saber si tus hijos tienen algún problema?
Es muy sencillo: si ves que guiñan los ojos para ver mejor, que se tropiezan mucho, se tallan los ojos frecuentemente, se acercan mucho a la televisión, computadora, mesa de dibujo o de trabajo, se les irritan los ojos, tienen lagrimeo o lagañas constantemente, les duele la cabeza seguido, tienen problemas de sensibilidad a la luz o problemas de coordinación… ¡es momento de actuar! Puedes ir directamente a tu Óptica Lux más cercana para recibir asesoría.
Hábitos para toda la vida
Como parte de las enseñanzas que les brindas a tus pequeños, es muy importante incluir el cuidado de su visión. Instrúyelos para que no se tallen los ojos, que se laven las manos después de jugar, de usar aparatos, de tocar mascotas, etc.
Por otra parte, puedes enseñarles de forma dinámica a proteger su visión haciendo ejercicios con la vista que fortalecerán sus ojos. Es muy simple: haz que miren un objeto a cierta distancia (lo más lejos posible pero que todavía se vea claramente) y después haz que miren algo muy de cerca.
También puedes hacer variaciones con esta técnica mirando hacia un lado y hacia otro. Practica con ellos (¡también te va a servir a ti!) preguntándoles cómo es el objeto lejano, qué colores tiene y para el objeto cercano, juega a que describan qué forma tiene, si se mueve, a qué se parece, etc.
Finalmente, cuida que en casa los niños siempre tengan la luz adecuada para todas sus actividades con la vista, especialmente para dibujar, leer, ver tele, jugar, etc. ¡Mantén los ojos bien abiertos para cuidarles su vista en todo momento!
